Quiero confesarte que mis intenciones no son buenas
he venido a ti ataviado como poeta
pero solo es la fachada de un vil ladrón.
He venido a expropiarme tus caderas,
ha robarme tu sonrisa,
ha ser el carcelero de tu emoción.
He venido armado solo con mis letras,
por escudo mi risa,
por espada un flanco de mi corazón.
Quiero confesarte que mis intenciones no son buenas,
que he venido a conquistarte, aunque tu no te quieras dejar.
25 de septiembre de 2010
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